Conceptos Condensados… Luz Brillante (Con aporte de Lali :))

Si fueras un remero de primera, si fueras el mejor remero, pero estuvieras con tu embarcación remando en dulce de leche perdería impacto totalmente tu esfuerzo, el cual es enorme, pero lo haces de cualquier manera, ya que esta en tu esencia esforzarte. Y después de horas te ves avanzar 5 centímetros en la carrera por avanzar doscientos metros.

Y te enorgulleces por tu avance, te enorgulleces de tu progreso, ya que tu esfuerzo no es en vano porque sabes que el aprendizaje engrandece, y lo importante es el tránsito, el camino.

Pero llegado el momento de ver que también se puede remar en agua cristalina y menos pesada que en el entorno en el que te encuentras te das cuenta que tu esfuerzo puede lograr mucho, muchísimo más, con el único objetivo de compartir tu don, tu talento; no por soberbia, sino por la mejora de todo el entorno entendiendo que el aporte de buenas cosas genera buenos entornos.

Es como si fueras el sol, y tu luz la razón de la vida, si diriges tu luz hacia una roca, seguramente poco sucederá pero al dirigirla al campo de tierra fértil verás rápidamente aflorar los frutos de lo que brindas.

Uno da y eso es bueno porque uno siempre, aunque parezca que solo los receptores de nuestra dádivas lo hacen, se nutre de la manera más pura entregando lo bueno de uno, dando lo mejor de sí, ya que uno vive en esa entrega, uno es atravesado por ese benigno ser que vive en nosotros, por la única razón de que el sol no puede negarse a sí mismo.

Todos en esencia somos seres de luz, a nuestra manera, en nuestro modo.
Cada uno tiene una particularidad en la que es único.
Solo es cuestión de encontrarla, pero también aprender a discernir, entre entregarla a quien le sea provechosa o desperdiciarla donde no rinda frutos, porque la generosidad bien entendida también está relacionada con cuidar, preservar y respetar nuestros dones sagrados.